Adicción a cocaína
La cocaína es una sustancia que se extrae de la planta de coca. En occidente se suele consumir principalmente intranasal (“esnifada”), fumada o inyectada (intravenosa). Se trata de la sustancia de abuso que más consultas genera de trastornos adictivos. Su precio, cada vez más bajo y el desconocimiento de su toxicidad y su capacidad adictiva han llevado a hablar de epidemia.
¿Cómo actúa?
La cocaína inhibe varios transportadores de neurotransmisores. La consecuencia más importante de esto es el aumento de una sustancia del cerebro: la dopamina. En base a su forma de actuar, muchos expertos afirman que es la sustancia más adictiva que existe. De hecho, es una sustancia capaz de desplazar a otras adicciones más temibles en la memoria popular, como la adicción a la heroína.
Toxicidad y problemas orgánicos
La cocaína produce frecuentemente:
-infartos de miocardio
-crisis epilépticas
-arritmias cardíacas
-ictus cerebrales
Todos estos problemas se dan incluso en adolescentes y adultos jóvenes. Su aparición no depende de las veces que se ha consumido la sustancia. Cada vez que se consume, incluso las primeras veces, se está en riesgo de que ocurra esto.
Problemas mentales
Además, la cocaína puede producir importantes problemas mentales:
– Por una parte, debido al gran estímulo que supone para las neuronas, hay un sufrimiento cerebral, que con el consumo repetido, puede llevar a un deterioro de la capacidad intelectual. No hay un tiempo determinado para este deterioro. Hay pacientes en los que se puede observar tras pocos meses de consumo, mientras que otros resisten años consumiendo sin apenas problemas de este tipo.
– Tras el consumo aparece en ocasiones un estado depresivo de duración variable, en el que el paciente puede incluso intentar suicidarse. Se le llama «crash». Otro problema también frecuente es la aparición de delirios paranoides o alucinaciones. Estos trastornos de tipo psicótico pueden ceder si se abandona el consumo, pero a veces pueden cronificarse, dando lugar a un trastorno muchas veces indistinguible de la esquizofrenia.
La adicción
A pesar de todo lo dicho anteriormente, el mayor problema que causa la cocaína es la adicción. Se trata, como hemos dicho antes, de una de las sustancias más adictivas que se conocen.
La adicción por la cocaína produce una disminución en la motivación del individuo: al afectado dejan de interesarle las cosas que le gustaban hasta el momento. Puede abandonar a sus amigos, a su familia, su trabajo o aficiones. Todo lo que tenía importancia para el paciente, va perdiendo su interés. Esto, unido a la frecuente depresión y a los sentimientos de culpa que invaden al consumidor, hacen que sea muy difícil tener una vida mínimamente aceptable y feliz. A pesar de todo este sufrimiento, cuando el consumidor intenta abandonar el consumo, se encuentra con una gran dificultad.
Tratamiento de la adicción a cocaína
El abandonar la adicción a la cocaína tiene ciertas particularidades respecto a otras sustancias adictivas. Por una parte se requiere siempre ayuda especializada. Aunque puede intentarse una primera aproximación ambulatoria (es decir, mediante consultas periódicas a un médico), en algunas ocasiones termina siendo imprescindible un ingreso en un recurso hospitalario y la asistencia a sesiones de terapia de grupo. En esta sustancia es especialmente importante la intervención de un médico, ya que los fármacos, aunque no van a solucionar por sí solos el problema , probablemente sean necesarios, dada la gravedad de estas adicciones.
Un caso específico muy frecuente es el consumo simultáneo de alcohol y cocaína. Este tipo de adicción tiene características especiales y un abordaje específico en sí mismo, siendo necesario el tratamiento del consumo de ambas sustancias. Otras veces la adicción a cocaína se une a determinadas conductas sexuales, que se vuelven adictivas en sí mismas al realizarse junto al consumo, también puede aparecer esta complicación con el juego patológico y otras adicciones.
Última revisión: 22/10/2016 Autor: Dr. Diego Urgelés Licencia CC